Anna Nordqvist consigue un triunfo histórico en el Evian Championship
Hace exactamente medio siglo Catherine Lacoste se convertía en la primera golfista europea de la historia en ganar un major. La jugadora francesa se imponía en el US Open de 1967 y abría el camino. La pionera. Hoy, en Francia cómo no, otra europea, Anna Nordqvist, ha sumado otro Grande en el saco del Viejo Continente. No abundan y por eso mismo conviene dar la dimensión que merece al Evian Championshipconquistado por la golfista sueca. Nordqvist ha lanzado un precioso guiño histórico en la tierra de Lacoste.
Ha sido un triunfo dramático, decidido en un desempate frente a la joven e inexperta norteamericana, Brittany Altomare, bajo unas condiciones dantescas. El cielo se abierto en dos en el Evian Resort justo antes del playoff y han caído chuzos de punta. Ha llegado a granizar y los empleados del campo han tenido incluso que salir a secar el green porque en apenas diez minutos de chaparrón se había quedado injugable.
Ha sido un desempate de supervivencia y Nordqvist se ha impuesto con bogey. Las dos han fallado la calle en el ya de por sí difícil hoyo 18. Ambas han tenido que jugar corto, han fallado el green y finalmente ha decidido el approach más certero de la jugadora nórdica.
Un final épico a un desenlace de torneo muy emocionante. A falta de dos hoyos teníamos a cinco jugadoras empatadas en la primera posición, pero claro, el final del Evian es un muro difícil de escalar y se han ido cayendo candidatas: primero Katherine Kirk, después Lydia Ko y finalmente Moriya Jutanugarn, que tendrá que esperar para igualar con su hermana en el palmarés de Majors. Sólo aguantaron Nordqvist y Altomare, entre otras cosas, porque eran las que venían por detrás y fueron las primeras en colocar un más que serio resultado de -9 en la casa club.
La victoria de Nordqvist tiene todos los ingredientes para ser catalogada como una gesta. Es su segundo Grande tras el LPGA Championship que conquistó en 2009. Han tenido que pasar nada menos que ocho años entre uno y otro. Además, es la primera europea que gana un Major desde el Evian de 2013 de Suzann Pettersen, es decir, veinte Grandes después. Y por si fuera poco, Nordqvist ha ganado en plena pelea física contra una mononucleosis que, por ejemplo, le impidió jugar entre el US Open y el British Open y que tuvo en vilo su participación en la Solheim Cup. Lógico que nada más meter el putt ganador hincara la rodilla en la hierba y se llevara las manos a la cara. Es el Major número 26 en la historia para una jugadora europea.
En cuanto a las españolas, Carlota Ciganda (+1) ha sido la mejor clasificada tras acabar con una vuelta de 70 golpes, su mejor ronda de la semana, puesto final 32º. Mientras, Azahara Muñoz (+3) se ha despedido con una tarjeta de 73 golpes, puesto 48º.
Fuente: Ten Golf