“Ten cuidado a qué árbol te arrimas para desarrollar un campo de golf”
En un proyecto de golf, el director juega un rol determinante y si éste no tiene experiencia, lo más probable es que en un corto o mediano plazo sufra el proyecto las consecuencias.
Después de 16 años de experiencia en esta industria, veo que aún hay personas que subestiman el diseño, desarrollo y la construcción de un campo de golf. Escucho a menudo “¿Que chiste puede tener diseñar y construir un campo cuando sólo debemos agregarle al predio pastito y listo?”. Obviamente lo tomo como una broma que ameniza la conversación en una cena. Sé que estas personas no tienen nada que ver con la industria, no juegan golf y jamás se aventurarían a hacer un campo.
El problema es cuando la gente que se especializa en alguna otra disciplina de la industria del golf (ajena al diseño y coordinación de obra) subestima la magnitud de dirigir un proyecto de primer nivel. Porque esto, al final, causa estragos económicos a los clientes, así como a la fluidez y calidad del campo.
Hay muchas cosas que debes considerar para elegir quien será el indicado para orquestar un proyecto. Éstos son algunos puntos:
- El director debe saber proporcionar un catálogo de conceptos puntual y adecuado al proyecto general que va más allá del arquitecto principal. Existirán varios profesionistas involucrados que requieren estar en el catálogo final para su licitación, presupuesto y/o ejecució
- Es necesario que el director defina el Plan de Estructura del Proyecto que se refiere al desglose preciso y detallado del proceso de cada punto del catálogo de conceptos general. También debe determinar si la construcción y el avance se llevan a cabo en conformidad con los documentos de diseño, contrato y programa de obra. Es importante un reporte quincenal puntual y exigente.
- Asegúrate que el director pase más tiempo en el proyecto que ningún otro participante. Sólo así podrá llevar una gerencia preventiva.
- Vigila el rendimiento de la construcción contra el programa de obra. Ser proactivo y estar a favor del proyecto te ayudará a atender problemas potenciales oportunamente.
- Es buena práctica pensar el proyecto de atrás hacia delante, teniendo en cuenta las ventanas de siembra como objetivos principales. Un programa de siembra bien estructurado es crucial para el éxito y será tu aliado ya que presionará a todos a cumplir las metas.
Dicen por ahí que la ignorancia es una bendición y aunque estoy de acuerdo con esto, concuerdo aun más con la definición de Steve Hawkins que señala: “El peor enemigo del conocimiento no es la ignorancia, sino la ilusión del conocimiento”.
En nuestra industria hay muchos que pretenden ser especialistas y ‘todólogos’ o simplemente subestiman o ignoran la seriedad con la que debemos desarrollar un campo de millones de dólares.
Es importante investigar a fondo la experiencia y los alcances de cada persona y empresa que ha tenido dentro de la industria del golf.
A los desarrolladores de campos de golf les aconsejo pedir cartas de recomendación, currículos y referencias como lo harían para contratar a alguien para hacer un trabajo tan serio como llevar las finanzas, la contabilidad o la dirección de su empresa. Es bueno pedir una segunda o tercera opinión como lo harían con un doctor.
Recuerda que todo tu dinero queda enterrado y los posibles errores y omisiones no se manifiestan tan pronto. Los vicios ocultos saldrán a flote más tarde, cuando ya no haya nadie a quien reclamar y las fianzas hayan cumplido el año de vigencia.
El contratar a un buen director de proyecto te podrá costar de un 5 a 10% de la construcción del proyecto, te aseguro que se pagará solo, al llevar un buen control de los tiempos, la calidad y el presupuesto. Esta inversión extra te dará una paz mental que de otra manera no vas a conseguir.
Agustín Pizá