El golfista que alza la voz contra Nicolás Maduro
El venezolano Jhonattan Vegas lamenta la situación «catastrófica» que vive su país, por culpa de un Gobierno «autoritario»
Jhonattan Vegas (Maturín, Venezuela, 1984) es un caso extraño. De niño no quería jugar al béisbol, el deporte nacional, sino ser jugador de golf. Su padre, Carlos, cuidaba un campo de nueve hoyos junto a un campamento petrolero en Monagas, a orillas del río Orinoco, al que iban a pasar el rato los empleados. Jhonattan y sus tres hermanos adoptaron el golf como la manera de competir entre ellos. “Eso me ha llevado hasta aquí”, recuerda ahora Vegas, después de fallar el corte en el Open Británico (11 sobre el par).
El primer golfista venezolano en el circuito estadounidense lamenta su mal juego, pero se muestra orgulloso de que la bandera de su país ondee en Royal Birkdale. “Es muy lindo representar a mi país. Espero que al verme otros jóvenes sueñen con jugar un Open. El golf no es para nada popular en Venezuela. Pero estar aquí pone el nombre del país en otro lugar y eso puede motivar a la gente”, afirma Vegas.
El nombre de Venezuela resuena en el discurso de Vegas con aires guerreros. Aunque vive en Houston, el jugador es otro de los actores que se rebelan contra el gobierno de Nicolás Maduro. “Es muy grave lo que pasa en mi país. Vivimos con un gobierno que es totalmente autoritario. Solo existe su manera de ver las cosas. La de los demás no existe. Hay mucha gente sufriendo. Es triste que un país tan bonito tenga un gobierno que se encarga de destruir, no de construir. Esperemos que haya un cambio pronto y venga alguien que nos enrumbe. La gente se muere por falta de comida y de medicinas. Es catastrófico”.
“Como venezolano alzo la voz. Le digo al mundo que nos merecemos algo mejor. Por eso luchamos. No nos quedaremos callados. A Maduro le diría que ha de cambiar las cosas. O las cambia él o que deje a otro porque el país no va por buen camino. Necesitamos un cambio urgente. Hemos llegado a un nivel en el que a la gente le da igual vivir o morir”, añade el golfista venezolano.
Vegas nunca lo tuvo fácil. En sus inicios, tenía que ir a la capital para jugar. “Yo tenía pocos recursos, y en nuestro país se encargan de que el golf sea elitista. Siempre fui difícil jugar, pero me fui abriendo puertas”, afirma. Emigró a Estados Unidos, se graduó en quinesiología en la Universidad de Texas gracias a una beca, y en 2008 se hizo jugador profesional. Fue por esa época cuando el presidente Hugo Chávez emprendió una cruzada contra el golf. “Respeto todos los deportes, pero no todos son iguales. ¿Dicen que el golf es un deporte del pueblo? Pues no lo es, solamente un pequeño grupo de burgueses puede ir y jugar a este deporte. Treinta hectáreas para que un grupito de pequeños burgueses vayan a jugar al golf. Y, además, con un carrito. Porque son tan flojos que ni siquiera caminan, van en un carrito”, dijo en 2009 Chávez, que quizás no recordaba cómo a Fidel Castro y al Che Guevara les gustaba de vez en cuando dar algunas bolas.
Bajo el mandato de Chávez desaparecieron muchos campos de golf. Mientras, Jhonattan Vegas se convertía en la figura que cuestionaba al régimen con sus éxitos. Sumó dos victorias profesionales, en el Bob Hope Classic de 2011, y en el Open de Canadá de 2016, por delante de Jon Rahm. Hoy, este tallo de 1,91m es el número 73 del mundo, y ha ganado casi 7,5 millones de dólares en el circuito estadounidense. Y no se calla contra Maduro.
Fuente: El País – Foto: GETTY